Les voy a contar dos situaciones divertidas que me sucedieron este fin de semana, gracias a ser parte de esa gran comunidad llamada Taringa!. Todo sucedió por subir el cuento "Testamento" y escribir en una comunidad literaria.
Para los que no conocen bien la página, paso a explicar: Taringa es un conjunto de posts, ya sea videos, películas, musica, artes, literatura, lo que sea, etc que sube la gente y que comparte con el resto del mundo. Además existen comunidades donde se reunen miembros y hace que la cosa sea un poco mas organizada (piensen que si todo eso que se sube aparece dentro de Taringa como una enorme lista, es medio difícil encontrar cosas que te interesen).
Retomamos, puse mi cuento, y se dio la casualidad que una personilla de la internet le gustó (al menos a una) lo suficiente como para pedirme si lo podía subir a su blog cuentopordia.blogspot.com que sube cuentos de distintos autores y se reserva el fin de semana para escritores amateurs. Obviamente le dije que sí y charlando me invitó a la feria del libro independiente (razón por la que puse el cartel tan a las apuradas). Ahora puedo decir que me publicaron.
Hasta acá la historia no roza de lo surreal, por eso les cuento la otra que es un poco más divertida. Dentro de la comunidad literaria, había un cuento de un chico de 12 años que realmente estaba muy mal escrito en cuestiones de gramática, puntuación y ortografía, pero que dentro de todo, y mucho menos para esa edad, estaba bastante bueno. De altruista y de al pedo que estaba, decidí corregirlo y mandárselo de nuevo (ahora que lo pienso podría pedirle permiso para publicarlo). En esto una chica (en realidad no me dijo la edad, pero uno siempre tiene la fantasia de que es joven) me pregunta si podria enseñarle algo de lo que sé ya que habia visto la corrección y además había leído el cuento. Otra vez, por estar al pedo y porque soy bueno, o al menos eso creo, le dije que si tranquilamente, pero que me muestre algo que escribió porque me es imposible enseñar sin tener ejemplos concretos, especialmente cuando lo que estoy haciendo principalmente es una crítica. En el lapso entre respuestas, me fije en su perfil a ver si había subido algún cuento algo y no encontré nada, por lo que de principio me pareció extraño, hasta que sucedio algo mucho más raro aún.
La chica en cuestion me mando los links de sus cuentos, pero no estaban subidos a Taringa, sino que estaban en Poringa, la versión roja de contenidos eróticos y pornográficos. Claro, la mujer en cuestión escribía cuentos eróticos y quería ver si tenía algun error. Por como soy, tuve que decirle la verdad, no tengo ni idea de este genero y no tengo suficiente experiencia en en el género, por lo que lo único que pude darle son consejos en cuanto a la estructura pero nada más. Hace un ratito acabo de recibir una respuesta satisfactoria y me mando un par de cuentillos mas para que me deleite. Todavía me pregunto como me convertí de corrector ortográfico a crítico erótico.
Bueno, terminado el asunto, descubrí que Taringa es un lugar lleno de oportunidades mágicas y maravillosas, pero especialmente, y es lo que me parece más atractivo, de situaciones bizarras y que poco tienen que ver con la realidad.
Saludos!
Texi
Simpática Situación!!
ResponderEliminarMe encanto la crónica
Gracias por el comentario.
ResponderEliminarNos estamos escribiendo!
Saludos
Texi